Fernando Rodríguez García es Santiago Pescador para todos los lectores.
Nació en Ceuta el 10 de enero de 1940. Un año más tarde su familia emigró a la Zona Internacional de Tánger. Fue entonces cuando, guiado por la estrella del Desarraigo, como él suele decir, comenzó su vida errante, que posteriormente le llevaría hasta Venezuela, Estados Unidos, Brasil y, de nuevo, en 1970, de regreso a Venezuela. En 1987, temiendo un estallido de violencia en ese país, dio por terminada su aventura americana y regresó a España.
Santiago y su familia se instalaron en Alcorcón (Madrid). Durante la crisis económica de 1993 comenzó a llevar un diario de sus experiencias. Trabajó como ingeniero técnico hasta el año 2005, cuando decidió jubilarse. La recopilación de todos sus apuntes le llevó a escribir varios relatos cortos y su primera novela de ficción, titulada Viaje por el árbol de las esferas, que aún no había sido publicada
Durante diez años colaboró como coordinador de la revista del Centro de Mayores de Alcorcón. El año 2012, su relato breve, titulado Claveles de sangre, obtuvo el 4º premio del Certamen organizado por la Comunidad de Madrid para mayores escritores. El año 2016, su cuento Maragato ganó la Mención Especial en el mismo certamen para mayores de la Comunidad de Madrid.
El 20 de enero de 2017 presentó su novela Huellas en la arena, inspirada en su vida como emigrante. Con esta novela comienza a firmar sus obras con el seudónimo de «Santiago Pescador».
Actualmente colabora con las revistas digitales «Horizonte de letras» y «Scriptorem», patrocinadas por la Asociación Nacional de Escritores Alfareros del lenguaje, de la cual es miembro activo. También colabora con el programa literario radiofónico Onda BookyAM Literaria.
Su colección de cuentos Relatos de un búho azul se publicó en otoño de 2018 y en noviembre de 2019 lo hace con su novela El Árbol de las Esferas, un viaje iniciático por el mundo de la cábala.
-Hola, Fernando, encantado de hacerte esta entrevista para que nuestros lectores te conozcan un poquito más, a ti y a tu obra; sobre todo a Santiago Pescador, que es tu pseudónimo… ¿Por qué ese nombre bajo el que firmas todos tus libros?
Es preferible que el escritor no esté metido en mi pellejo. Es otra faceta de mí mismo, el escritor, que decidió reemplazar al pintor y buscar en la literatura una forma de expresión más fuerte y con más posibilidades. Santiago no carga con el karma de la “Estrella del Desarraigo”. Es más libre y lleva el nombre del patrón de España. Es pescador y no solo lo hace en los recuerdos de los mares turbulentos del pasado, también pesca en el río de la vida, y de él saca las historias y experiencias del presente.
-Tras esta aclaración, Fernando, te haré la primera pregunta que siempre hago a los escritores que entrevisto: ¿un escritor nace o se hace? ¿Cuál es tu opinión a este respecto?
Es evidente que para ejercer alguna de las artes, tales como el canto, la pintura, la música o la literatura, hay que nacer con ese don que tarde o temprano se abrirá paso en la vida de la persona, para mostrarse luego con total plenitud. En su momento necesitará del estudio y la dirección de unos buenos maestros, para aprender técnicas y reglas para depurar fallos y defectos.
¿Una persona que domine bien la gramática y que sea rica en su vocabulario, puede llegar a escribir una novela o un ensayo? Claro que sí, pero siempre le faltará la magia de aquel que posee, por naturaleza, el don de la escritura. En él no habita el genio que convierte un texto normal en algo sublime.
-Acabas de publicar en Amazon, con los servicios de BooKyAM, tu libro El nido del búho. Además, tienes otro libro de relatos titulado Relatos de un búho azul… ¿Qué tiene para ti esta ave, por qué te inspira a la hora de titular tus libros?
El búho se relaciona siempre con los misterios de la noche. Sus grandes ojos ven con claridad aquello que está oculto en la oscuridad. Son testigos de crímenes horrendos o amores apasionados. Tienen mucho que contar sobre las debilidades de los seres humanos. El búho es el hilo conductor que une “Relatos de un búho azul” a “El nido del búho”.
-Tu reciente obra, El nido del búho, es un compendio de relatos escritos estos últimos años, desde 2015 a 2022; además de artículos sobre el gran García Lorca y unos apuntes –o cuadernos viajeros- sobre algunos de tus viajes, incluidos los lugares en los que viviste como emigrante, “guiado por la estrella del desarraigo”, como tú mismo dices, hasta recalar nuevamente en España… ¿Qué tienen de ti todos estos relatos? ¿Por qué decidiste compendiar todos estos cuentos junto con los artículos a los que hemos hecho referencia?
Durante los diez años que estuve colaborando con la revista que se editaba en el Centro de Mayores de la CM en Alcorcón, escribíamos artículos sobre los eventos culturales, conciertos, obras teatrales, exposiciones o conferencias que allí se celebraban. También hacíamos comentarios sobre los libros que estábamos leyendo. Yo solía aportar artículos sobre mi vida como emigrante, especialmente Tánger y Venezuela, pues es allí donde se formó mi carácter y mi personalidad como ciudadano del mundo. El contacto continuo con la literatura me llevó a escribir relatos y competir en concursos. Obtuve dos premios de la CM y así se forjó un eslabón de plata que unía el pasado con el presente en una sola cadena. Esto es lo que he tratado de reproducir en mi libro, para que los lectores tengan la oportunidad de vivir las mismas emociones e inquietudes que yo tuve.
- ¿Qué significa el título “El nido del búho”?
El nido es el lugar donde el búho lleva todas sus presas. Todo lo que ha estado acechando en la oscuridad. En mi caso, las historias, los personajes que “pesco” para crear mis relatos.
-Como dije antes, tienes un libro de relatos ya publicado, una novela esotérica, El árbol de las esferas, y otra anterior titulada Huellas en la arena, pero ¿en qué género las incluirías tú?
El árbol de las esferas, como tú bien dices, es, ante todo, una novela esotérica, enmarcada en un momento histórico de nuestro país: la gran crisis económica que comenzó a vivirse en esa década. La cubrí con algunos personajes y situaciones fantásticas para hacer comprensibles conocimientos esotéricos que, de otra forma más ortodoxa, habrían sido largos y tediosos, y mi intención era la de escribir un libro para todo el público, formado o no en el mundo de la cábala.
Huellas en la arena, en su primera parte, está basado en mi niñez y mi adolescencia, pasando por el asilo en la Zona Internacional de Tánger y la migración a Venezuela. La segunda parte, en la que el personaje, ya adulto, se convierte en un triunfador en su mundo laboral, tiene rasgos de mi persona, pero se cubre con una capa de ficción para proteger nombres de personas y sociedades.
-Has vivido en varios países antes de recalar definitivamente en España, ¿cuánto han influido, en tu labor como escritor, estas vivencias?
Estas vivencias, más propias de un trotamundos, han ampliado mi horizonte y enriquecido mis conocimientos sobre otras culturas. Esto influye mucho a la hora de ponerse a escribir. Puedes crear historias que sucedan en el extranjero con más facilidad.
-Esas vivencias a las que me refería en la pregunta anterior, esa época que viviste como emigrante, ¿te han hecho llegar a alguna conclusión?
Así es, cambié el curso de mi destino, cosa que demuestra que el ser humano posee el libre albedrío.
-Según dice la sinopsis de tu libro, “Su último trabajo es un dantesco cuento, cuyos personajes y tema le fueron exigiendo cada vez más y más hasta convertirse en una obra de seis capítulos que terminó este mismo año 2022”... Este último cuento de tu libro, ¿podríamos decir que perfectamente podría haber sido una novela?
No lo sé. Lo que sí me ha demostrado es que no podía ser un cuento de cinco páginas. Los propios personajes me pedían más y más espacio. El nido del búho es, definitivamente, mi último libro de cuentos. Mi próximo libro será una novela, sin duda alguna.
- ¿Por qué la sinopsis lo considera “dantesco”?
La sinopsis lo considera “dantesco” porque él mismo, inmerso en su locura, el mal de Diógenes, crea en su casa un entorno que recuerda una de las etapas que recorre Dante al bajar a los infiernos en busca de su amada, el Tercer Círculo.
-Hay trabajos, artículos, de este libro que los escribiste, durante algunos años, en la revista del Centro de Mayores de la C. M. de Alcorcón… ¿Qué te aportó aquella etapa?
Mi genio de la escritura desplazó al genio del dibujo y de la pintura. Ganó seguridad y experiencia, me motivó a estudiar Escritura Creativa durante tres años y dar el salto a la autoedición.
-También escribes para la revista “Horizonte de Letras”, de la Asociación Nacional de Escritores de Alcorcón “Alfareros del lenguaje”, de la que eres socio, y para la revista “Scriptorem”, editada por BooKyAM; además de participar en el programa radiofónico en Podcast Onda BooKyAM Literaria… ¿Qué te aporta escribir para estas revistas literarias o participar en programas similares?
La verdad es que estoy encantado de colaborar con las revistas y con el programa radiofónico en Podcast. Montar ese estudio de grabación improvisado y luego escuchar mi propia voz narrando el cuento, con su música de fondo, me encanta. Me siento como un niño con zapatos nuevos.
-Muchos de tus textos llevan esa carga esotérica y misteriosa que enamora a muchos de nuestros lectores. ¿Todos tus libros, relatos o cuentos están inspirados en ese esoterismo y en esa magia?
No todos, también me gusta ser descriptivo, lograr que el lector se vea envuelto en el escenario de los hechos. El realismo mágico llega solo, no hace falta que lo inviten a pasar. Cuando te vas a dar cuenta, ha inundado el escenario y se ha apoderado de los actores y de su comportamiento. No lo puedo evitar.
-Pero, por otro lado, también están repletos de humanidad y de realidad, de la que todos palpamos y vemos. ¿Cómo se mezclan esa realidad y esa magia esotérica para que tus relatos sean verosímiles?
El iniciado esotérico, hermético o cabalista, no es ningún ser sobrenatural. Es un ser humano como cualquier otro, pero el animal que todos llevamos dentro lo lleva bien sujeto. De esta forma, la parte humana puede moverse por senderos paralelos, lejos de los lastres, las pasiones insanas, los vicios, la maldad o la envidia que se mueven impunes por nuestro mundo terrenal. Conseguirás que tus actos sean más serenos y justos, la gracia está en tener este comportamiento con total naturalidad.
-Fernando –o Santiago-, ¿de dónde parten tus textos? ¿De una imagen, de una idea…?
Casi siempre, mis textos parten de una idea, un suceso que llama mi atención, un comentario que escucho. Es importante tener nuestras antenas siempre alertas, la inspiración puede llegar de cualquier lado y en el momento menos pensado.
-Supongo que alguna vez te habrá sobrevenido el “bloqueo del escritor”. ¿Cómo te enfrentas a él?
Así es. Durante la pandemia sufrí un bloqueo total, incluso anímico. Pensé que nunca me recuperaría. Sin embargo, pude reaccionar a tiempo y logré escribir “El tercer círculo”. Mi último cuento.
-Seguro que has oído alguna vez que casi todos los escritores seguimos algún “ritual” a la hora de escribir (escribir siempre en el mismo lugar, a la misma hora, con la misma luz…) ¿Qué proceso sigues tú a la hora de escribir?
No, no tengo ningún ritual en particular, pero sí es cierto que, en los últimos años, me he sentido más cómodo en mi estudio, donde tengo el ordenador, una mesita con escritorio y flexo, mis libros a mano, incluso la cadena de música que me ha prestado mi hijo. Me gusta la música clásica. En síntesis, sentirme a gusto y centrarme en mi trabajo. No pido más.
-Cuando escribes una novela, ¿la estructuras de alguna manera?
Claro que sí. No concibo que se pueda escribir algo sin tener, primero, un tema bien definido. Segundo, los actores, quiénes son, cómo son. Tercero, el país y los escenarios que enmarcan la historia. Cuarto, la estructura o esqueleto de la narración. ¿Qué tipo de voz narra la novela? ¿Cuáles van a ser los puntos de ignición? Si sucede en un lugar que no conoces, documentarse debidamente. Y, por último, qué tipo de final escoges, convencional o abierto.
-Supongo que siempre –más o menos- necesitas documentarte cuando estás embarcado el algún proyecto literario. ¿Necesitaste documentarte para escribir este libro recién publicado, o tus recuerdos y vivencias fueron suficientes?
Cuando publicas una colección de cuentos, primero, como fue el caso de
Relatos de un Búho azul y ahora con El nido del Búho, en ambos casos mis recuerdos y mis vivencias fueron suficientes para escribir no solo algunos de los cuentos, pero sí todos los relatos que hablan de mis migraciones y, más tarde, de mis viajes. En ambos casos, la sección de cuentos es la que puede necesitar alguna documentación, dependiendo especialmente del lugar o país escogido como escenario de los hechos.
-Y, si fue así, ¿qué te costó más: la documentación o la propia escritura del libro?
En El nido del Búho no he tenido que documentarme, solo recopilar, ordenar y crear dos secciones del libro. Todo estaba ya escrito desde el 2019 hasta el 2022. Al final, un buen repaso para depurar errores y maquetar en A5.
-Fernando, tus anteriores libros fueron editados en editoriales tradicionales… ¿alguna vez te has encontrado con dificultades para conseguir editor?
Mi primer libro, Relatos al calor de un brasero, fue aprobado por una editorial de Madrid muy conocida, en el año 2010, pero resultaba demasiado caro para mí y terminé haciendo una auto-publicación estupenda, con cubierta y todo, gracias a los servicios de una casa de fotocopias de mi barrio.
Los tres libros siguientes fueron editados por dos editoriales andaluzas en 2016, 2018 y 2019. Ninguno fue rechazado.
-¿Por qué has elegido, para este último libro, El nido del búho, la autoedición a través la plataforma KDP de Amazon?
Esta vez he elegido la plataforma de KDP de Amazon porque busco un nuevo enfoque para el marketing y la divulgación del libro por Internet. Quiero ver cómo se mueve este mundo actual, donde todo sucede más rápido que en las clásicas librerías. Alguien dijo: “renovarse o morir”.
- ¿Conoces a tus lectores? ¿Cómo son? Y, a los que no conoces, ¿cómo los imaginas?
Al ser esta faceta de mi vida tan reciente, en realidad son pocos y están distribuidos entre Caracas, Miami y Madrid. Son personas normales, más o menos de mi edad; trabajadores o comerciantes que han tenido que luchar mucho, incluso emigrar, como ha sido mi caso. Compartimos aficiones e inquietudes.
Los que no conozco, me los imagino más jóvenes, con deseos de viajar y conocer mundo. Les atrae el mundo espiritual, los conocimientos ocultos y, por qué no, todo lo fantástico.
-Fernando, ¿cómo ves el actual panorama literario español?
Se escribe mucho, tengo entendido que son más de 40.000 libros al año. Pero, desafortunadamente, es un mundo muy mercantilizado y manipulado. Las grandes editoriales van a lo que van, a ganar dinero y nada más. Los escritores noveles tenemos muy pocas probabilidades de poder ganarnos la vida escribiendo, a veces nos utilizan como calcetines de poner y tirar.
-¿Cuáles son los libros que, de alguna manera, te han marcado como persona y como escritor?
Los seres humanos vivimos la vida por etapas y, si eres un lector asiduo, a cada etapa le correspondería un libro o un autor determinado. Por ejemplo, mi niñez fue marcada por Los tigres de Mompracem, de Emilio Salgari; o Veinte mil leguas de viaje submarino, de Julio Verne. De adolescente me apasionaba la cultura griega y, gracias a los libros de la biblioteca del Liceo Francés de Tánger, leí, en francés, todo lo que encontraba de Homero, la Caída de Troya, la Ilíada, la Odisea o Los viajes de Telémaco, sin olvidar a los clásicos franceses como Molière. Estos solo eran libros educativos. Cuando emigramos a Venezuela y comencé a ganar mi propio dinero, me di el gusto de comprarme un libro con edición de lujo, editado por Aguilar, las obras completas de Gustavo Adolfo Bécquer. Quedé seducido tanto por sus leyendas como por sus cartas y poemas. Aún conservo este libro como oro en paño. En 2023 cumplirá sesenta y cuatro años. Pertenecía al Círculo del Libro y me hice con una buena biblioteca que traje para España cuando regresamos en 1987.
-¿Crees que es posible que la literatura, hoy en día, con tantos avances tecnológicos y la sociedad tal como está, haga reflexionar a la sociedad? ¿O eso solo pasaba en tiempos pasados?
El escritor que pretenda hacer reflexionar a la sociedad será borrado del mapa, lo harán desaparecer o amanecerá con dos tiros en la nuca. El “Poder” no quiere personas que piensen por sí solas, quiere borregos que los sigan. El ser humano será instruido para complementar el trabajo de los robots. Al inicio del siglo XX se dio por concluida la era del humanismo y entramos, nos guste o no, en la era del transhumanismo.
-Por tu experiencia como escritor, ¿qué consejo o consejos le darías a un escritor principiante?
Ante todo, ser humilde y constante en su trabajo. Tener siempre la mente abierta a las ideas, opiniones o críticas de otros pensadores. No dejar de leer clásicos o contemporáneos. Ten siempre a mano un cuaderno de notas y escribe, deja que tu mente fluya. Trata de unirte a un grupo de escritores de tu pueblo o de tu zona. Si encuentras alguna escuela de escritura creativa, únete a ella. Te vendrá bien compartir tus trabajos con otros escritores, siempre será mejor que estar sentado delante de la caja tonta. También puedes entrar en la web de Escritores.org y competir en concursos nacionales, hay cientos de oportunidades de hacerlo. Esto te curtirá. No olvides que esto no es una carrera de cien metros lisos, esto es una maratón, la resistencia es lo que cuenta.
Es todo lo que puedo decirte, lo que hagas después, es cosa tuya.
- ¿Actualmente estás trabajando en algún nuevo libro, en algún nuevo proyecto literario? ¿Podrías adelantarnos algo?
Sí. Estoy trabajando en un proyecto que me exige un gran esfuerzo de investigación, ya que se desenvuelve en el mundo de la arqueología. Como tengo este espíritu viajero que no se puede aguantar, comienzo en Toledo y finalizo en plena guerra de Siria. Menos mal que existen hemerotecas que se pueden consultar. La satisfacción que siento, por dedicar tantos días a la investigación, me compensa el esfuerzo realizado. Es una gozada.
-Fernando, para finalizar, ¿dónde pueden encontrar los lectores tu nuevo libro El nido del búho y en qué formatos? ¿Dónde pueden encontrar tus otros libros?
Se puede encontrar entrando en la web de Amazon/Libros/El nido del Búho. Santiago Pescador.
Mis otros libros se pueden encontrar en Libretería/Librería Deseos/Santiago Pescador. En su catálogo muestran las portadas de Huellas en la arena, Relatos de un Búho Azul y El árbol de las esferas. Me consta que hay otras web de literatura que ofrecen estos libros de segunda mano.
-Ha sido un placer realizarle esta entrevista, Fernando. Espero y deseo que tu libro sea todo un éxito, y que lo sean los que estén por llegar… Muchas gracias por tu tiempo. Un fuerte abrazo.
Gracias a vosotros por darme la oportunidad de comunicarme con todas las amigas y amigos que os siguen. Otro abrazo para vosotros y un beso para ellas.
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